Acciones contundentes pide Presidenta Castro a Secretaría de Seguridad

 


Dos masacres en menos de 72 horas obligan a la Presidenta de Honduras Xiomara Castro a exigir vía tweet respuestas efrectivas a las autoridades encargadas de dar seguridad en el país.
Hasta ahora las medidas implementadas no han dado los resultados esperados, pese al anuncio de una baja en la tasa de homicidios, capturas y sendos operativos en zonas tomadas por maras y pandillas arropados bajo el manto del Estado de Excepción.
Pero la realidad es otra, los capturados en menos de 24 horas salen en libertad. Las estadísticas refieren que durante el Estado de Excepción entre diciembre del 2022 y enero del 2023, sumaron 8,155 detenidos. De ellos apenas 105, quedaron en prisión y no precisamente por el delito de extorsión, sino por otros delitos.
Cada administración de seguridad ha tenido sus falencias, pero ésta en la que la población se llenó de expectativas por cambios y un ataque directo a la criminalidad, se quedó corta pese a la buena voluntad de muchos oficiales y policías de escala básica comprometidos por cumplir con su trabajo.
Esta sacudida que les da la Presidenta en los tweet que escribió ayer, demuestra que ella les cumplió y que ellos están llamados a capturar, pero más que todo a prevenir.
Es hora de un giro de timón, de analizar si las estrategias hasta ahora implementadas deben cambiarse, si los cuadros nombrados en puestos clave cumplen su rol y valerse de le experiencia de muchos policías e investigadores que saben bien cómo evolucionan los criminales.
Como sociedad, como ciudadana, nos queda por una parte exigir respuestas, pero también sumarnos para denunciar. Sé que en muchas ocasiones usted y yo, hemos buscado respuestas y nos frustramos por no encontrar eco a nuestras denuncias, pero hasta en eso, debe darse un cambio.
Es un reto el que ahora tiene en sus manos la Policía. Esto incluye los Centros Penitenciarios en los que hay quejas de jueces que aseguran que las medidas se volvieron más blandas a lo interno de los recintos,
Se ocupa ordenar, para evitar reyertas en esos espacios y ligerezas, como el caso de la puesta en libertad de un violador serial en El Progreso Yoro. Un hombre condenado a 127 años y siete meses, del que nadie se explica porqué lo dejaron en libertad.
Es ahora, es antes que otra nueva masacre nos sacuda y otros inocentes mueran. Es ahora que paren los asaltos, los robos en las calles y las extorsiones. Es ahora que todos los hondureños clamamos por sentirnos seguros.


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